La solicitud busca evitar que otras empresas estén incumpliendo la ley respecto a las cifras permitidas de mortandad de salmones al interior de las plantas y no volver a vivir nuevos desastres ecológicos como el registrado en la cuenca del reloncaví el año 2016   

Mayor fiscalización y control en la mortandad de salmones en centros de engorda industriales, solicitaron pescadores artesanales de la región de Los Lagos, a raíz de las últimas acusaciones sobre  la manipulación de estadísticas de mortalidad en la empresa Nova Austral, ubicado en la Isla Capitán Aracena, en la región de Magallanes.

La fiscalización, realizada por la Superintendencia del Medio Ambiente de Magallanes (SMA), el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) y la Gobernación Marítima de Punta Arenas (Directemar), dió paso para que se iniciaran dos investigaciones para establecer responsabilidades ante los hechos.

“Esperamos que de aquí en adelante las autoridades redoblen los controles en la industria salmoneras de todo país, para evitar que se sigan produciendo malas prácticas como las que se han denunciado en Nova Austral, las cuales solo buscan evitar infracciones y el cierre de sus plantas. No queremos que posteriormente tengamos que lamentar lo ocurrido el año 2016, cuando vimos cómo toneladas de salmones muertos eran trasladados desde los centros para ser tirados en el mar”, señaló la vicepresidenta de Conapach, Zoila Bustamante.