En comisión de Pesca de la Cámara de la Diputados, argumentaron las razones que tienen para solicitar un Ministerio del Mar.

Este miércoles, dirigentes de la Conapach, en cabezados por su presidente Oscar Espinoza, asistieron vía sesión telemática a la Comisión de Pesca de la Cámara de Diputados para reiterar su oposición a la inclusión del sector pesquero en el proyecto de ley que crea el nuevo Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentos, Recursos Forestales y Desarrollo Rural.

En la oportunidad, Espinoza señaló que lo que requiere el sector pesquero es fortalecer la  actual institucionalidad pesquera, que ha ido creciendo en favor de la pesca artesanal por medio de la Ley de Caletas y la creación de Instituto Nacional de Desarrollo Sustentable de la Pesca Artesanal, INDESPA; avances que quedarían invisibilizados frente a la compleja institucionalidad de actividades como la Agricultura.

“Chile es mar y la mayoría de los pescadores artesanales no se han sentido escuchados” argumentó el dirigente respecto al anhelo histórico y el trabajo desarrollado por Conapach  para tener un Ministerio de Mar, y prosiguió “es difícil sentirnos representados y relacionados en este ministerio”, refiriéndose a lo inconsulto del proyecto y a la poca mención de los quehaceres pesqueros en el proyecto, sobre todo de la acuicultura.

Por su parte, José Alvarado, director de Conapach y presidente de la Federación de pescadores artesanales de Hualaihué,  región de Los Lagos, señaló que existe malestar en el sector pesquero porque el proyecto fue presentado en medio de las pandemia, con suma urgencia y si ser consultado con los principales actores, donde el objetivo principal es seguir fortaleciendo las grandes empresas y no al mundo pesquero artesanal.

Asimismo, Zoila Bustamante, vicepresidenta de la Conapach, se refirió al proyecto diciendo que los pescadores artesanales en su conjunto están caminando por un camino que no quieren caminar porque su deseo ha sido siempre un Ministerio del Mar, el que merecen por derecho propio y donde la principal traba es la actitud del Ministro de Agricultura de hacer oídos sordos a las demandas de los 120 mil pescadores artesanales de Chile, que merecen un mínimo de respeto.