Pese a rechazo transversal de los sectores pesquero artesanal, agrícola familiar campesino, comunidades indígenas y forestal, el gobierno insiste en tramitar con suma urgencia un proyecto que, a juicio de todos los involucrados, no ha sido debidamente consensuado y en condiciones en que el país se encuentra en estado de emergencia por la pandemia. 

La creación de un Ministerio de Pesca y Acuicultura es la petición histórica del sector pesquero artesanal que reflotó a raíz de la tramitación con suma urgencia del proyecto de ley que crea el Ministerio de Agricultura, Alimentos y Desarrollo Rural, el cual adjunta a sus quehaceres las actividades de la subsecretaría de Pesca y el sector Forestal.

Ambas actividades a ser añadidas al nuevo ministerio, según ha sido señalado por sus propios actores en las últimas Comisiones de Agricultura de la Cámara de Diputados, tanto la pesca artesanal como del sector forestal han requerido de los distintos gobiernos de turno, la creación de estamentos autónomos como son un  Ministerio de Pesca y una subsecretaría Forestal respectivamente.

La solicitud está fundamentada en la necesidad de organismos que se hagan cargo de forma exclusiva a las materias que tratan, de cada vez de mayor complejidad, que enfrentan los efectos del cambio climático, la sequía, entre otros factores, y que en el caso de la actividad pesquera artesanal, estrenan nuevos instrumentos de fomento y desarrollo como son el Instituto Nacional de Desarrollo Sustentable de la Pesca Artesanal, INDESPA y la denominada Ley de Caletas.

Lo mismo sucede en el sector agrícola, cuyos representantes ligados a organizaciones nacionales campesinas, de la pequeña agricultura familiar y comunidades indígenas, se han manifestado en contra de plantear un cambio institucional tan importante en medio de una crisis sanitaria.

En su conjunto, las organizaciones ligadas al sector agrícola, rechazan las malas prácticas del gobierno traducidas en la tramitación de medidas inconsultas con las bases (ignorando, por ejemplo, la Consulta Indígena) y de no otorgar prioridad a otras materias más urgentes como son la seguridad alimentaria en medio de la pandemia, fomento a la producción, derecho al agua, protección de la tierra para uso agrícolas, entre otros temas que no aparecen en ninguna parte del proyecto.

Asimismo, distintos sindicatos y asociaciones gremiales de trabajadores se han manifestado en contra, entre ellos  los trabajadores del Instituto Nacional de Desarrollo Agropecuario, INDAP; de los Programa de Desarrollo Local, PRODESAL; del Servicio Nacional de Pesca y Agricultura, SERNAPESCA y de la misma Subsecretaría de Pesca, quienes han manifestado incertidumbre al no conocer el nuevo escenario que presenta esta ley.

“Después de haber presenciado cada una de las Comisiones de Agricultura, nos damos cuenta que no solo somos los pescadores artesanales quienes no queremos este nuevo Ministerio, hay un sin fin de organizaciones de distintos ámbitos de la agricultura, del sector fosteral, comunidades indígenas, así como sindicatos del sector público quienes rechazan de plano esta iniciativa parlamentaria y pedimos que se retire la suma urgencia que se le ha puesto”, indicó la vicepresidenta de la Conapach, Zoila Bustamante.

Y agregó, “como Confederación hemos señalado de todas las formas posible que lo que requiere el sector pesquero artesanal es un Ministerio del Mar, de Pesca y Acuicultura, coincidimos en eso con la Alianza Marítima de Chile, la que agrupa a muchas de las instituciones ligadas al mar desde distintos ámbitos y que han expresado también la necesidad de un ministerio de nos agrupe y nos represente a todos los actores”.